Miembros de la academia sueca realizaron conductas inapropiadas, por ello ha impactado negativamente al prestigio del galardón

La Academia Sueca informó hoy que este año no se otorgará el Nobel de Literatura, sino hasta el 2019, debido al escándalo de filtraciones y supuestos abusos sexuales que la ha situado en una crisis histórica.

A raíz de los inconvenientes relacionados con conductas inapropiadas por parte de miembros de la institución, ésta indicó que ocho de sus 18 miembros renunciaron, y con ello se ha generado, en estos momentos, pérdida de “confianza” hacia la misma; de ahí la necesidad de posponer el fallo sobre el premio hasta el 2019.

La Academia había decidido antes no otorgar el galardón literario o aplazar su entrega, solo por situaciones como las guerras mundiales del siglo XX o por no encontrar candidatos idóneos entre los nominados.

Fue en 1949 la última vez que ocurrió un aplazamiento para dar el premio, cuando el Comité Nobel estimó que ningún aspirante cumplía los criterios y reservó el reconocimiento para el año siguiente, en el que se entregaron dos galardones: uno para William Faulkner y otro para Bertrand Russell.

Ejemplos de puntos críticos para el organismo han sido, también, la decisión de premiar en 1974 a dos escritores suecos que formaban parte del Comité, al igual que las salidas de dos miembros en 1989 como protesta a la negativa de la Academia de condenar la emisión de una “fatwa” (edicto islámico) contra el indiobritánico Salman Rushdie.

Sin embargo, a la voz pública, nunca se había desarrollado un hecho del estilo que requiriera posponer el fallo del ganador, ante la necesidad de regenerarse, primero, con un trabajo de cambio “a largo plazo y contundente”, de acuerdo con palabras de su secretario provisional, Anders Olsson.

La Fundación Nobel, responsable máxima de los premios, apoyó la determinación de la Academia, subrayando que representa un hecho “serio” que ha impactado negativamente al prestigio del galardón e invitando a tal institución a “poner todo su esfuerzo en la tarea de restaurar su credibilidad”.

Cabe apuntar que el escándalo estalló en noviembre pasado, cuando un diario publicó la denuncia anónima de 18 mujeres por abusos y vejaciones contra el artista Jean-Claude Arnault, vinculado con la Academia mediante su club literario y por ser esposo de una de sus miembros, Katarina Frostenson.