Por órdenes del gobernador Rutilio Escandón, mil elementos del Grupo Interinstitucional encabezados por la Fiscalía General del Estado (FGE) realizaron un nuevo desalojo en el Área Nacional Protegida “Cerro Brujo”.
El predio ubicado en el municipio de Ocozocoautla, fue tomado por un grupo de personas desde el 8 de febrero de 2014; ante esto, el gobierno del estado diseñó una serie de estrategias para recuperar los terrenos en conflicto.
Se trata de una extensión de más de mil hectáreas (336 hectáreas físicamente afectadas y 691 hectáreas afectadas indirectamente) entre los que se encuentran ubicados 15 ranchos, a los cuales sus propietarios no podían ingresar debido a que los invasores tenían puestos de control con personas armadas, cuyo fin era la tala y el tráfico de maderas preciosas, como cedro y caoba.
Cabe destacar que el operativo fue vigilado por la Comisión de Derechos Humanos de Chiapas para garantizar el respeto a las garantías individuales y el correcto uso de la fuerza pública.